DEVOCIONAL DIARIO
Éxodo 4.10-15.
En estos versículos Moisés continúa exponiendo las razones por las que él, se cree incapaz para realizar la tarea que le está siendo encomendada. Ahora es su capacidad de hablar. Aquí aparece un pasaje difícil para el ser humano, aún los discípulos de Jesús no lo entienden y le preguntan a Jesús con sus propias conclusiones religiosas. ¿Por qué unas personas nacen ciegas, o sordas o…? Dios responde: Yo te hice, Yo soy quien da la capacidad de hablar, de ver de oír y es notorio que cuando Dios hace a una persona sin capacidad de ver o oír, no lo hace por injusticia, es parte de su gran plan divino que vamos entendiendo poco a poco. Era parte del plan de Dios escoger a un hombre que no tuviera una fluidez para hablar, porque el que necesitaba hablar era Dios, no Moisés. No hay obstáculos para ser obediente a Dios, lo que le interesa es que le obedezcas. La tarea dada a Aarón es ser el interlocutor de Moisés, tarea que cambia más adelante. Cierra el pasaje con una frase que no debes olvidar: “Yo estaré con tu boca…y les enseñaré lo que tienen que hacer”. Lo que Dios ocupa no es gente llena de capacidades, es gente dispuesta a hacer lo que Él dice.