DEVOCIONAL DIARIO
Ezequiel 22. 25-27.
En estos versículos, Ezequiel debe denunciar a los profetas, a los sacerdotes, estas personas que están abusando de la autoridad espiritual, “despedazan” a la gente que busca acercarse a Dios, se adueñan de las propiedades de la gente a través de engaños religiosos y buscan ser reconocidos públicamente. Para mal de peores los sacerdotes, que son quienes deben enseñar a respetar la ley, ellos mismos no la respetan, contaminando los espacios que son de Dios. Dios los denuncia porque ellos llaman puro lo que es impuro y llaman santo a lo profano; liderando al pueblo hacia el mal, en lugar de anunciar el amor a Dios y a su prójimo. En otras palabras, la denuncia de Dios es, quienes debían exaltar a Dios, lo que hacen es profanarlo con sus actos y generan a la vez que los que no conocen a Dios también profanen su nombre. Cuando hicimos un compromiso de seguir a Dios automáticamente adquirimos el compromiso de exaltar, ante los demás, el Nombre de Dios, cuando actuamos incorrectamente profanamos el nombre de Dios.