DEVOCIONAL DIARIO
Salmo 39. 1-6
Es un salmo de súplica individual, el escritor, David, hace una reflexión sobre la vida, el valor de esta. Decide estar callado mientras sufre, para no ofender, para no dañar a nadie, cuando nos enojamos tendemos a ofender, por eso el escritor decide quedarse callado.
La reflexión sobre la vida incluye una revisión de sus caminos, por donde ha caminado hasta aquí. Nos invita a pensar en que la vida es corta, ninguno de nosotros sabe cómo será el momento de la muerte, como habremos de morir. Cuando vemos personas que sufren enfermedades degradantes en lo profundo del corazón hacemos una oración de súplica al Señor, que por favor así no sea nuestro final y rogamos a Dios por un final más digno.
El escritor reconoce que la vida es corta y frágil, en cualquier momento se puede ir porque el aliento de vida, el soplo de Dios sobre nosotros puede ser quitado, entonces hace una reflexión que es para hoy también: «¡Ay, de nada nos sirve tratar de enriquecernos pues nadie sabe para quién trabaja!».
En otras palabras, este salmo nos invita a reflexionar en dónde estamos poniendo nuestras fuerzas, nuestra juventud, cuál es el camino que llevamos, nos recuerda que la vida es muy corta como para dejar de vivirla solo para hacernos ricos, porque no sabemos en qué momento nos iremos y no sabemos qué va a suceder con todo aquellos en lo que invertimos la vida.